Está directamente relacionada con el cardo corredor (Eryngium campestre, E. maritimum ). Se trata de una planta vivaz anual, de carácter invasor que coloniza tierras baldías o campos recien abandonados al cultivo y que tiene una raíz tuberosa que puede profundizar varios metros en el suelo, la planta como tal emerge en  primavera  y no suele pasar del medio metro de altura.

La seta de cardo crece en la raiz del cardo borriquero.

El cardo setero aparece en primavera de raíces o rizomas ya formados generalmente en años anteriores.

Cuando maduran las semillas, hacia finales de verano o principios de otoño, la parte aerea de las setas de cardo se secan y acaba desprendiendose de la raíz  a lo largo del otoño e invierno, incluso algún ejemplar puede aguantar hasta la primavera, y es común ver rodar los cardos impulsados por el viento por las llanadas de nuestros campos. Sin embargo la raíz tuberosa permanece activa y llegada la siguiente primavera brota un nuevo cardo, y parece ser que esto podría repetirse varios años . El cardo setero recibe diferentes nombres  dependiendo del lugar (cardo corredor, cardo yesquero, cardocuco, cardo borriquero, cardo panical, cardo setero, cardo cabruno, etc, etc).

Es posible cultivar setas de cardo en el jardín.

En ocasiones e frecuente que al arrancar la seta nos llevemos parte de la raíz del cardo.

Existe cierta controversia en el  tipo de relación que mantiene la seta de cardo con el propio cardo. Aparentemente el hongo invade  los tejidos de la raíz del cardo, nutriéndose y acabando con la vida de éste, visto así sería un tipo de parasitismo dónde el hongo pone fin a la vida del cardo, sin embargo hay  opiniones autorizadas en el sentido de que el hongo solo es capaz de invadir la raíz de la umbelífera al final de la vida del cardo, si así fuese sería una relación saprofitica. Sin embargo hay una evidencia, algunas cepas de micelio seleccionado, como es el caso del MICECARDO, colocado junto a la raíz del cardo, independientemente de la edad de la planta, acabara invadiendo la raíz, destruyendo el cardo y dando setas.

Cardo micorrizado para producir setas. 

Sobre estos rizomas de considerable desarrollo se nutre el micelio y posteriormente aparecen las setas.