En el jardín podemos disfrutar de momentos inolvidables cuidando y viendo como crecen nuestras plantas, como la primavera o el verano lo llenan de vivos colores y como el otoño provoca la marchitez de las flores y las hojas van tomando esos tonos amarillos, rojos o naranjas. Este momento, el del otoño, será el preferido por muchas setas para sorprendernos en los tronquitos o en el suelo con sus colores y formas variadas. No deja de ser un aliciente más para ese espacio tan personal, sin olvidar que luego en la mesa también nos deleitaran.
Los tronquitos de setas se pueden colocar en cualquier rincón de nuestro jardín.
Dependiendo del espacio disponible, de nuestras preferencias, lugar donde vivimos, ubicación, etc, podemos repartir tronquitos aquí o allá, o agruparlos en el sitio más indicado para respetar las mejores condiciones que favorezcan la salida de las setas.
Podemos jugar con el grosor y altura de estos troncos, variedades de setas, árboles micorrizados, espacios para los setales naturales, etc. Las posibilidades y combinaciones pueden ser muchas (tronquitos de diferentes alturas que pueden dar un toque decorativo, combinación de distintos árboles y setales), además aunque el otoño y la primavera sean los periodos preferidos por las setas, según variedades, dependiendo del lugar donde vivamos, podrán aparecer también en otros momentos del año.
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En el huerto trabajamos la tierra, sembramos, plantamos, regamos, cuidamos de él y finalmente nuestro trabajo se ve recompensado con sus cosechas (verduras, hortalizas, frutas, etc), además al trabajar un huerto, al estar en contacto directo con los elementos (tierra, agua, aire, etc) recibimos también beneficios que satisfacen aspectos profundos del ser humano.
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| Pequeño huerto de setas |
Este espacio tan gratificante puede tener también un lugar para las setas (tronquitos, árboles, setal natural, etc) y complementar la recogida tradicional de los productos del huerto con las setas.
Al ser en principio un espacio más amplio incluso podemos plantearnos una producción mayor y comercializar alguna seta que tenga una buena acogida en la zona.
Debemos cuidar que el ambiente y la tierra donde pongamos los tronquitos o plantemos los árboles este libre de contaminantes, ya que los hongos fijan fácilmente en sus tejidos estos principios nocivos.
Ejemplares de setas que han crecido cultivadas en tronquitos.
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